Sabemos que una lectura crítica debería, al menos, ser analítica, reflexiva y con una disposición activa del lector. Es aceptado de igual modo que la lectura crítica busca esencialmente trascender lo literal y alcanzar un nivel valorativo. También se ha insistido, especialmente desde los aportes del análisis del discurso, que la lectura crítica incluye el saber rastrear la ideología que le subyace a determinado texto. Si bien comparto algunos de estos rasgos, considero que la lectura crítica es el resultado de combinar ciertas operaciones de pensamiento que, al conjugarlas, logran no sólo explicar y comprender mejor los textos sino sacarles el mayor provecho en su dimensión significativa. Pienso que existen niveles en una “arqueología” de los textos, que el modo como se estructuran prefigura un sentido, y que las diferentes tipologías textuales reclaman para sí diferentes prácticas de lectura. En este sentido, considero que la lectura crítica es el resultado de un proceso formativo, la convergencia de técnicas, saberes y determinadas habilidades cognitivas.
¿Pero cómo lograr esas habilidades en nuestros estudiantes?, ¿cuál sería la mejor manera de alcanzar esos objetivos? Por supuesto, además de la motivación y la insistencia del maestro para que sus alumnos logren dicha “calidad lectora”, hace falta desarrollar procesos de pensamiento que permitan alcanzar tales propósitos. A tres de estos procesos es que deseo referirme en los párrafos que siguen, advirtiendo que su complejidad de conocimiento y aplicación dependerán del contexto de los estudiantes, la edad y el nivel escolar en que se desempeñen. Como en todos los procesos educativos, el maestro deberá saber cuándo y cómo adaptarlos, transformarlos o ajustarlos a un determinado contexto.
1. Aprender a relacionar. Es una actividad cognoscitiva que “permite establecer, de manera concomitante, la identidad y la alteridad de dos o más magnitudes u objetos de saber”[1]. Este proceso de pensamiento deberíamos enseñarlo desde los primeros años de escolaridad. El ejercicio de la observación, de la observación detallada y cuidadosa, podría dar altos resultados en los futuros estudiantes. Sería fundamental también no enseñar las cosas separadas sino integradas, esforzándonos siempre por poner en escena el saber contextualizado. Formar a nuestros estudiantes en una mente sistémica para la que sea habitual ver las partes en función de un todo, y valorar un elemento en función de los otros elementos del conjunto. En este mismo sentido los profesores y profesoras de los primeros grados tienen una enorme responsabilidad en lograr que los diferentes sentidos se desarrollen y encuentren su mayor grado de cobertura. Pienso que si al estudiante se le dan herramientas y se lo pone en situación de encontrar lazos de unión entre los sonidos, los colores, los sabores; si explora en las potencialidades de sus sentidos, será desde luego un mejor lector crítico de la vida, del mundo y de la cultura. La enseñanza del proceso analógico puede ser otro recurso para potenciar esta estrategia de pensamiento[2]. Una formación consistente en relaciones permitiría saber y poder encontrar oposiciones, contrastes; simetrías, asimetrías; relaciones unívocas o equívocas; relaciones contrarias o contradictorias.
Las implicaciones para una lectura crítica son evidentes: contar con procesos cognitivos que lleven a hallar en un texto las conexiones entre los elementos, las correspondencias de fondo, la interacción entre diversos aspectos, las vinculaciones de subsuelo. En síntesis, esta operación de pensamiento es fundamental para poder dar cuenta de la estructura de los textos. Digámoslo de manera categórica: los lectores críticos son los que evidencian o descubren relaciones implícitas o lejanas en los textos; los que pueden develar la estructura de fondo que soporta el significado textual; los que pueden discriminar sentidos.
2. Aprender a inferir. De manera amplia, la inferencia es un tipo de razonamiento “mediante el cual la conclusión se desprende con necesidad lógica de las proposiciones antecedentes”[3]. Siendo más específicos, podemos afirmar que la inferencia es un “actividad de razonamiento –de la que la deducción y la inducción son casos particulares– centrada en el pasaje de una proposición a otra en cuanto a su posible valor de verdad”[4]. Los analistas del discurso hablan de por los menos tres tipos de inferencia: inferencia contextual, inferencia situacional e inferencia interdiscursiva[5]. Pero más allá de sutilezas lógicas, lo importante es desarrollar este tipo de razonamiento para que nuestros estudiantes aprendan a sacar consecuencias, implicaciones, conclusiones prácticas de hechos, situaciones o textos. Si la inferencia es “un proceso discursivo por el que alguien pasa de una información, una creencia o un conocimiento a otra creencia o a otro (presunto) conocimiento”[6], es clave que enseñemos los procesos de pensamiento relacionados con la deducción, la inducción y, desde luego, la abducción.
Si se cuenta con buenas bases inferenciales nos resultará más fácil sacar consecuencias respecto de premisas, o alcanzar presunciones o presuposiciones más plausibles. Pienso que si no trabajamos fuerte este proceso básico del pensamiento, si no nos esforzamos por desarrollar en nuestros estudiantes el razonamiento riguroso, seguiremos alimentando la irresponsable cuando no inconsistente opinión caprichosa o el simplismo para dar cuenta de problemas esenciales del hombre mismo, la sociedad o la cultura de la cual participa. Tengamos presente lo que nos advertía John Dewey en el ya clásico texto Cómo pensamos, “la educación consiste en la formación de hábitos de pensamiento vigilantes, cuidadosos y rigurosos”[7].
Las implicaciones para una lectura crítica son definitivas, especialmente si lo que nos importa es enseñar y estimular en los estudiantes la lectura de indicios, el razonamiento hipotético, las prácticas de intertextualidad y, de manera medular, la consolidación de un pensamiento argumentado clave al momento de dar cuenta de la validez de determinada lectura. Parafraseando a Umberto Eco, seremos lectores críticos “si asumimos que tratamos con universos como si fueran textos, y con textos como si fueran universos”[8].
3. Aprender a autorregularse. Recordemos que la metacognición consiste en la conciencia y el control de los procesos cognitivos. John Flavell, el gran teorizador de este proceso, consideraba que en la metacognición intervenían al menos tres tipos de conocimiento: sobre las personas, sobre las tareas y sobre las estrategias. Dada la relevancia de este proceso de pensamiento bien vale la pena insistir en la enseñanza de la autorregulación. Esta estrategia “juega un importante papel en el desarrollo metacognitivo ya que estos procesos son responsables del control de las situaciones y del continuo ajuste del pensamiento y la conducta a las demandas internas de la persona y las externas, planteadas por la situación”[9]. Según Barry Zimmerman “uno de los rasgos característicos del aprendizaje autorregulado es el uso que hace el sujeto de las estrategias a propósito de optimizar su aprendizaje”. Por eso se habla de “aprendizaje autorregulado por oposición al aprendizaje incidental”[10]. La autorregulación, cuando se trata del aprendizaje, “está siempre dirigido a una meta y controlado por el propio sujeto que aprende”[11]. Hacen parte de la autorregulación la planificación, la supervisión y la evaluación.
Mi propia experiencia como maestro me ha mostrado que la mayoría de los aprendices no son capaces de autorregularse, que poco conocen del tipo y calidad de la tarea que enfrentan, que ignoran sus propios estilos de aprendizaje o que son totalmente indiferentes a la selección de la mejor estrategia para alcanzar la meta propuesta o la tarea asignada. Y al no sacar al aire estos procesos de pensamiento, al dejarlos en la “caja negra” de mire a ver cómo hace cada quien, pues el resultado es un aprendizaje regulado desde afuera y no catapultado y controlado por el mismo aprendiz. Es evidente que la autorregulación busca que el estudiante sea responsable de su proceso de aprendizaje.
Las implicaciones de la autorregulación para una lectura crítica son múltiples: reconocer los pensamientos previos, asumir acciones de monitoreo y control constante durante el proceso lector, mantener un actitud reflexiva y evaluar el resultado. O si se quiere ser más específicos, establecer unas metas al leer un texto, seleccionar las estrategias, percibir las dificultad del tipo de texto elegido, monitorear la propia motivación y la selección de estrategias para reanimarla, planificar el tiempo necesario para dar cuenta de la tarea, reconocer el momento en que debe pedirse ayuda, saber captar las condiciones del contexto, poder reorganizar la estrategia o el camino elegido para dar cuenta de un texto.
*
Los tres aprendizajes anteriormente expuestos: relacionar, inferir y autorregularse, son estrategias de pensamiento esenciales si queremos que la lectura crítica no quede en buenas intenciones formativas o como una demanda sin realismo. Si en verdad nos interesa propiciar y desarrollar la lectura crítica en nuestros estudiantes tendremos que, antes de ofrecer tácticas y estrategias sobre los contenidos de los textos, es urgente enseñarles –con decisión y persistencia– las operaciones cognitivas que soportan y dan perdurabilidad a este modo de leer.
Referencias:
[1] Véase Greimas y Courtés, Semiótica. Diccionario razonado de la teoría del lenguaje, Gredos, Madrid, 1982, p. 339.
[2] Consúltese el texto Aprendizaje por analogía de María José González Labra, Trotta, Madrid, 1997. En esta obra se muestran ejemplos de cómo potenciar el pensamiento analógico para la adquisición de conocimientos en el campo de la biología y la química.
[3] Eli de Gortari, Diccionario de la lógica, Plaza y Valdés, México, 2000, p. 255.
[4] Considero conveniente revisar lo que se dice al respecto en el Diccionario de análisis del discurso, bajo la dirección de Patrick Charaudeau y Dominique Maingueneau, Amorrortu, Buenos Aires, 2005, pp. 317-321. También son valiosas las precisiones de Luis Vega Reñón y Paula Olmos Gómez en su utilísimo Compendio de lógica, argumentación y retórica, Trotta, Madrid, 2011, pp. 297-301.
[5] Op. cit., p. 320.
[6] Compendio de lógica, argumentación y retórica, op. cit., p. 298.
[7] John Dewey, Cómo pensamos. Nueva exposición de la relación entre pensamiento reflexivo y proceso educativo, Paidós, Barcelona, 1989, p. 82.
[8] Citado en “Cuernos, cascos, zapatos: algunas hipótesis sobre tres tipos de abducción”, en El signo de los tres. Dupin, Holmes, Peirce, editado por Umberto Eco y Thomas Sebeok, Lumen, Barcelona, 1989, p. 274.
[9] Si se desea profundizar en este aspecto léase Estrategias metacognitivas. Aprender a aprender y aprender a pensar, de Juan Mayor, Aurora Suengas y Javier González Márques, Síntesis, Madrid, 1995, p. 102.
[10] Mar Matos, Metacognición y educación, Aire, Buenos Aires, 2001, p. 43.
[11] Op. cit., p. 43.
Fredy Torres P. dijo:
A veces creemos como docentes que los estudiantes de grados inferiores no están en la capacidad de desarrollar procesos cognitivos relacionados a la inferencia, la inducción o la deducción lógica; pero me es claro que justamente allí está la clave que potencializa y posibilita a un futuro lector crítico.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Fredy, gracias por tu comentario.
MARIA DEL PILAR MENDEZ CNSP dijo:
El ejercicio de transformación del estudiante “lector”, se debe iniciar desde los primeros años de escolaridad, en donde los tres aprendizajes expuestos en el texto: “aprender a relacionarse, inferir y autorregularse, deben ser tomados como el pilar de que la lectura crítica no quede en palabras y en el vacío. Por lo tanto, es urgente enseñar con decisión y persistencia las operaciones cognitivas que dan soporte y durabilidad a la lectura crítica.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
María del Pilar, gracias por tu comentario.
karina dijo:
Como docente, veo la necesidad de incentivar a los estudiantes de forma lúdica en sus primeros años a realizar lecturas y así mismo la investigación, formando sus propias opiniones sobre textos leídos.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Karina, gracias por tu comentario.
Yenni Salamanca dijo:
Estoy de acuerdo con el autor, en cuanto menciona que el proceso de pensamiento se debe realizar de modo gradual y con métodos pedagógicos adecuados, en donde se debe ayudar al estudiante desde sus inicios educativos a construir su persona literaria, fomentándole el campo de cuestionamiento, investigación y autonomía, que más adelante le servirán para su futuro.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Yenni, gracias por tu comentario.
Martha Alonso B. dijo:
Cordial saludo:
Fortalecer la lectura critica en los educandos es enseñarles a comprender los contenidos a ir más alla de lo ovio en otras palabras es desarrollar un pensamiento critico es no quedarse solo en la alfabetización, es observar, analizar, interpretar, abstraer y comparar, en conclusión vincularse con el texto, interrogar al autor e intentar contrastar sus argumentos con otros autores.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Martha, gracias por tu comentario.
Neidy dijo:
La lectura es una necesidad del ser humano, para aprender desarrollarse y conocer el mundo que lo rodea, se leen las acciones, las imágenes, los actos, es un ejercicio implícito en desarrollo de las habilidades cognitivas y de lenguaje, así pues seria no solo un fin si no una aliada para construir a la par habilidades y procesos de pensamiento.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Neidy, gracias por tu comentario.
Diana Abello dijo:
Muy buenas tardes, sin duda la lectura es el camino al conocimiento, pero saber leer empleando estos procesos de relacionar, inferir y autorregularse, conllevan al aprovechamiento máximo de la lectura, que hoy en día son herramientas fundamentales en el aula.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Diana, gracias por tu comentario.
Martha Lucía Ariza dijo:
Maestro gracias por sus aportes:
Considero que es importante desarrollar o potencializar las habilidades u operaciones cognitivas que permitan formar lectores críticos desde la educación inicial, pues se necesita ejercitar estas habilidades hasta adquirir el hábito de aplicarlas de manera natural y espontánea y esta es una de nuestras funciones como docentes desde las estrategias didácticas que planeemos.
Considero que los procesos de relacionar, inferir y autorregularse son esenciales como usted afirma, pero considero que hay otros que pueden complementar los anteriores como la interpretación para poder comprender y expresar significado de situaciones, actividades, juicios entre otros. La Explicación para afirmar o justificar los resultados de un razonamiento y la evaluación para verificar, valorar o confirmar la credibilidad de afirmaciones, situaciones u opiniones de una persona.
Finalmente estoy de acuerdo con usted cuando habla de la importancia de la autorregulación, pues esta permite tomar conciencia de nuestro propio aprendizaje, de nuestras habilidades cognitivas y de nuestros propios juicios para monitorear y mantener una actitud reflexiva y crítica.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Martha Lucía, gracias por tu comentario.
Garson Duarte dijo:
Completamente de acuerdo con el texto y sus estrategias para lograr desarrollar en los estudiantes la gran habilidad de ser lectores críticos, pues en clase se evidencia que la mayoría de los estudiantes no logran entender un problema matemático, no logran vincular el proceso matemático con la lectura y su relación estrecha, esto debido a la falta de relacionar e inferir un problema que no pasa de los 5 renglones, y es que este texto, ayuda al maestro a crear y, en especial, a adoptar y aplicar estrategias para poder formar a los estudiantes y fomentar dichas habilidades.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Garson, gracias por tu comentario.
Angela Delgado M dijo:
Buenas tardes Maestro. Considero que la importancia del pensamiento crítico, lo resume muy puntualmente Linda Elder, al definirlo como el pensamiento autodisciplinado,, autoguiádo, empático, razonable y reflexivo desde la acción metacognitiva.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Angela, gracias por tu comentario.
CLAUDIA ALFONSO dijo:
Cordial saludo.
Totalmente de acuerdo con la afirmación “no basta con una buena intención”, nuestro sistema educativo y hasta nosotros mismos caemos frecuentemente en esta trampa mediática ¡ las buenas intenciones! y esto hace que nuestro proceso de enseñanza aprendizaje no sea optimo , ni responda frente a las necesidades de la actualidad. La intención sola no genera movimiento, cambio, disposición, resultados. Debemos a través de estos procesos de formación e intercambio de saberes, propiciar ambientes reflexivos, dinamizadores en donde la lectura y la escritura sean la prioridad para cada nivel escolar atendiendo a sus procesos de pensamiento. Solo a través de la persistencia y la creatividad la lectura en cada ser humano tendrá un papel protagónico en cuanto que movilizará pensamientos, sentimientos y acciones.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Claudia, gracias por tu comentario.
Maria Cristina Ceballos dijo:
La lectura critica busca trascender, permitir a nuestro pensamiento combinar operaciones para llegar a comprender mejor los textos, es un proceso formativo, el cual a mi parecer se debe lograr desarrollando habilidades en nuestros estudiantes, a través de la motivación, desde los primeros años es importante lograr que se desarrollen sus sentidos, de esta forma se logra tener mejores lectores críticos, que aprendan a sacar consecuencias, implicaciones, conclusiones prácticas de hechos y situaciones, teniendo como base estos tres aprendizajes como son el relacionar, el inferir y el autorregularse. Solo nos queda una tarea propiciar en nuestros estudiantes el desarrollo de la lectura critica a través de la persistencia y estrategias novedosas.
Maria Cristina Ceballos
CNSP
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
María Cristina, gracias por tu comentario.
Sandra Urbina dijo:
Buenas tardes, en este documento retoman algunas preguntas que como maestros nos planteamos a diario, ya que en nuestra labor de enseñanza todos queremos desarrollar en nuestros estudiantes las habilidades de pensamiento que permitan en ellos alcanzar con mayor facilidad una lectura critica. Si bien sabemos en la actualidad ha sido complejo llegar a nuestros estudiantes con la intención de involucrarlos en la lectura, se está trabajando desde los más pequeños para desarrollar los procesos de pensamiento necesarios, bien lo menciona en el documento que tengan la capacidad de relacionar, inferir y autorregularse frente a la lectura y su relación en el contexto actual.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Sandra, gracias por tu comentario.
Laura Camila Sierra dijo:
Hablando de la lectura crítica como principio fundamental en el proceso de formación en estos tiempos, leo este texto y es inevitable no cuestionarme sobre aquella conclusión para la educación desde el texto de Harari “¿En tiempos de big data cual es el papel del educador?” o mejor aún, lo aterrizo a la idea de qué se debería enseñar y sobre qué se debería educar si ya no es el dato. Asimismo, al leer el texto concluyo con relación a estas cuestiones, que en esta época el docente no es reconocido como prioridad en la educación por los conocimientos que posee sino por lo que hace con esa información a diario. Es valioso por como la leyó ojalá críticamente esa información y como la hace palpable. CNSP
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Laura Camila, gracias por tu comentario.
Sandra morales Toro. dijo:
Cordial saludo, considero que la lectura crítica es el proceso donde juega un papel importante la motivación y estilo de aprendizaje que promueve cada estudiante para que pueda sacar el mejor provecho, y así potenciar sus habilidades cognitivas, siendo primordial propiciar espacios que les permita hacer análisis, interpretación, e inferencias, y finalmente que se den el permiso de rumiar el texto.
Es fundamental formar el hábito de lectura desde los primeros años de escolaridad para fomentar el gusto por la lectura crítica y así emitir juicios y cuestionar de manera coherente.
Cordial saludo, considero que la lectura crítica es el proceso donde juega un papel importante la motivación y estilo de aprendizaje que promueve cada estudiante para que pueda sacar el mejor provecho, y así potenciar sus habilidades cognitivas, siendo primordial propiciar espacios que les permita hacer análisis, interpretación, e inferencias, y finalmente que se den el permiso de rumiar el texto.
Es fundamental formar el hábito de lectura desde los primeros años de escolaridad para fomentar el gusto por la lectura crítica y así emitir juicios y cuestionar de manera coherente.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Sandra, gracias por tu comentario.
Johanna dijo:
Si queremos formar estudiantes críticos, es importante desde la primera infancia enseñar a deducir e inducir y buscar diferentes estrategias para mantener una actitud reflexiva y siempre evaluar los resultados.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Johanna, gracias por tu comentario.
Marby Núñez dijo:
El trabajo del docente en la escuela es fundamental para contribuir a los procesos de pensamiento, que permitan desarrollar en los estudiantes la capacidad de relacionar lo que percibe en su entorno desde la observación, para luego contrastarlo con la realidad de la cual hace parte; así como es necesario que aprenda a inferir desde su postura, aunque esto es algo complejo gracias a los pocos hábitos de lectura que tienen, seria de vital importancia realizar acciones de monitoreo que le permitan al docente evaluar los resultados y avances.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Marby, gracias por tu comentario.
Diego A. Hernández Yasnó dijo:
Cordial saludo, estoy de acuerdo completamente con los temas tratados de la sobre los procesos de pensamiento y la lectura crítica, a veces vemos que por largo o corte que sean los textos, los estudiantes se ven dispersos en en ello por no tener bases siquiera de disciplina para cada actividad por sencilla que sea, y a pesar que puedan meterse en el tema e interesarles tanto se ven inmersos en el cansancio, por eso me parece muy interesante la auto regulación, pero también activar en ellos sus habilidades y gustos con dirección a lo sensorial, auditivo, cultural, visual, sabores. Creo que si no les despertamos esas emociones, es más complejo y tardío un proceso de pensamiento y de lectura crítica. (CNSP)
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Diego, gracias por tu comentario.
LUZ DARY TINJACÁ CAÑÓN dijo:
Cordial saludo
La lectura crítica permite ampliar el conocimiento combinando operaciones de pensamiento para ayudar a explicar y comprender los textos desde un proceso formativo que permite analizar desde el lenguaje y su esencia.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Luz Dary, gracias por tu comentario.
María Elizabeth dijo:
La lectura crítica relacionada con el pensamiento sistémico, es fruto de una nueva comprensión que se ha ido integrando seguramente en las disertaciones permanentes por pensar la educación y de la calidad de la misma, por aprender a ‘leer y fluir’ en los nuevos contextos. En el ensayo usted menciona “formar a nuestros estudiantes en una mente sistémica para que le sea habitual ver las partes en función de un todo”, frente a lo cual, siempre se ha pensado en cómo desarrollar el pensamiento relacional, afectivo, creativo, crítico, analítico, resulta ser un hallazgo interesante el pensamiento sistémico y éste en ‘comunión’ con los procesos de lectura.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
María Elizabeth, gracias por tu comentario.
María Alejandra Garzón dijo:
Con respecto a sus apuntes son de un aporte muy interesante ya que en definitiva nos permite coincidir el ejercicio de lectura crítica como una actividad compleja que supone la utilización de diversos tipos de conocimientos que se pone como meta, objetivo y ruta La comprensión e interpretación no sólo de un texto, sino de la vida misma. Desde esta óptica enseñar el proceso de lectura crítica en definitiva implica abordar además de contenidos conceptuales y procedimentales, conocimientos de tipo económico social y político.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
María Alejandra, gracias por tu comentario.
Adriana Pérez dijo:
Buenas tardes.
Uno de los objetivos actuales en la educación es desarrollar la capacidad crítica en cada uno de los estudiantes, sin embargo, para lograr desarrollar la lectura crítica debemos enfocar nuestro trabajo en la formación de estudiantes conscientes y responsables de su realidad, todo esto a partir de espacios donde prime el diálogo y el discernimiento, para que ellos logren descubrir a partir de los puntos de vista y opiniones de los demás el reflejo de las realidades. Todo este proceso en compañía de nosotros sus maestros.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Adriana, gracias por tu comentario.
Leidy Stefanni Barreto Galindo dijo:
Es clave para lograr una lectura crítica fomentar una disposición activa por parte del lector, para esto es necesario permitir a los estudiantes fortalecer la decisión y la persistencia al momento de estar frente a la diferente tipología textual que se ofrece no solo dentro del aula sino también fuera de ella, pues de esta manera su interés se despertara y se activaran las operaciones del pensamiento, se autorregula, al momento en el que el mismo busca las estrategias para llevar acabo su lectura en los diferentes espacios donde se encuentre, relaciona e infiere sus preconceptos con los contenidos y temáticas que está comprendiendo de su lectura nueva.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Leidy Stefanni, gracias por tu comentario.
Claudia Gutiérrez dijo:
Un lector crítico pone al servicio de la masa, las realidades que en ocasiones no se vislumbran tan claramente, para que no se siga en la ceguera cognitiva, social y política.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Claudia, gracias por tu comentario.
Carmen Rosa Piñeros Castañeda dijo:
La Lectura Crítica aporta ampliamente al desarrollo del pensamiento dado que permite analizar desde diferentes puntos las expresiones del lenguaje, donde se argumenta, organiza, deduce y se construye conocimientos para luego aplicarlos.
Es una tarea ardua para los maestros , mantener una motivación por la lectura.
El texto nos invita a seguir formando hábitos en la lectura a través de los tres aprendizajes( aprender a relacionar, inferir y autorregularse), práctica que debemos hacer para nosotros y nuestros estudiantes
Gracias.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Carmen Rosa, gracias por tu comentario.
Nubia Barrera dijo:
Muchas gracias por tan valioso texto, dónde relacionar, inferir y autorregularse dejan de ser solo palabras y pasan a ser una gran herramienta para formar personas críticas y en busca de nuevos conocimientos.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Nubia, gracias por tu comentario.
William Orlando Bravo B dijo:
En la lectura crítica se desarrollan muchos procesos de pensamiento, pues leer y vivir es lo mismo, porque se lee porque se vive y se vive porque se lee, para vivir debemos estar a diario desarrollando diversos procesos de pensamientos como: relacionar, comparar, observar, clasificar, etc. con la lectura podemos sumar, restar, dividir y multiplicar oportunidades simbólicas que permiten abstraer la realidad, por ello la lectura desarrolla muchos procesos de pensamiento.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
William Orlando, gracias por tu comentario.
Alberto Espejo dijo:
Parece interesante cómo se puede percibir el mundo del lector crítico y comprensivo, sería una excelente opción siempre y cuando las variables de todo tipo se confabularon para cumplir tan exigente objetivo. Considero que hay otras variables a tener en cuenta para generar un lector crítico, tales cómo sus vivencias, visión
de mundo, estado económico.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Alberto, gracias por tu comentario.
Clara Isabel Morales Ramírez dijo:
Saludo cordial. Realmente todos sus aportes son muy valiosos para mí como docente que oriento diferentes edades. Esto me hace ver, que aunque lo vemos como obvio, muchas veces olvidamos las diferencias entre los estudiantes, que a pesar del grado se note una gran diferencia entre ellos, esto por sus capacidades y hasta la misma formación en la familia. Mucho que reaprender para nuestra labor educativa. Muchas gracias.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Clara Isabel, gracias por tu comentario.
Ma Eugenia Cárdenas dijo:
Maestro, reciba un cordial saludo
Llama mi atención el aspecto de la autoregulación en el proceso de aprendizaje, ya que como menciona en el texto está dirigido a alcanzar una meta implicando la planificación, la supervisión y la evaluación.
Considero importante brindar a los estudiantes y brindarnos, como docentes este direccionamiento con respecto a la lectura crítica ya que esto permitiría encaminar la acción lectora con calidad . Generar hábitos desde esta perspectiva optimizará procesos de observación y de inferencia para facilitar la acción de la lectura profunda.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
María Eugenia, gracias por tu comentario.
Sandra Moya dijo:
Correlaciones de saberes. Inferir por medio de relaciones intertextuales e interdisciplinares. Autorregulación. Estos tres pasos que se entrelazan, deben ser ejercicios que comiencen desde el momento en que el estudiante comience a descubrir el mundo en el que se manifiesta su existencia. Los docentes deben comenzar a enlazar y no sectorizar saberes, de manera que el estudiante empiece a relacionar y sopesar algunos conocimientos adquiridos para llegar a un fin en el proceso de pensamiento lógico: Tener claridad mental y conceptual de cada uno de sus aprendizajes.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Sandra, gracias por tu comentario.
Yudy cuellar dijo:
Como maestros es importante independiente de la asignatura que orientemos trabajar la lectura crítica teniendo en cuenta la edad y el nivel escolar, igualmente adaptarlos a un contexto que permita que el estudiante se motive, analice y lo relacione de manera que se apropie dando un aporte significativo a su aprendizaje; lo difícil es llevarlo de manera objetiva a un resultado evaluativo cuantitativo como lo pide un sistema. Ojalá se lograra la autorregulación que el estudiante sea responsable de su proceso de aprendizaje.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Yudy, gracias por tu comentario.
Carolina Herrera dijo:
Buenas tardes.
Frente a este texto, puedo comprender que se reconoce que las habilidades de pensamiento necesitan un agente importante que actúe como motor provocando un engranaje perfecto que forma a l buen lector, ese agente resulta ser la motivación, el deseo de aprender y la angustia por comprender el contexto.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Carolina, gracias por tu comentario.
Carolina Herrera dijo:
Buenas tardes. Frente a este documento, se puede mencionar que los proceso de pensamiento que llevan a la lectura critica se desprenden de la motivación, y trascienden a otras habilidades que se van robusteciendo en el camino a una formación en la lectura, esta se hace consiente y exigente, por tanto las habilidades que están en un inicio como un hecho dado por la naturaleza adquieren su mayor potencial en tanto se va perfeccionando el buen arte de leer.
Gracias
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Carolina, gracias por tu comentario.
Libardo Montoya dijo:
Maestro Fernando: El relacionar, inferir y autorregularse permite realizar un análisis critico, donde se comprende y se analiza la información, se motiva a ir más allá de lo leído, profundizando de manera autónoma las dudas que van apareciendo en el proceso lector y este proceso va de la mano con las practicas cotidianas que realiza el estudiante, donde toma decisión con determinación, leyendo su entorno y aplicando lo aprendido a lo real.
El relacionar, inferir y autorregularse permite que el lector se acerque a nuevas fuentes literarias similares, donde crea nuevas hipótesis y esta en un proceso constante de la construcción de nuevas teorías y aplicando este proceso al medio social en que vive donde se garantiza aprendizajes críticos desde la colectividad.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Libardo, gracias por tu comentario.
jose antonio parra caballero dijo:
Cordial saludo;
Pienso que uno de los problemas mas complejos del proceso educativo es sin duda dificultad para procesar, recuperar, almacenar información, que incida en
el desempeño intelectual de los estudiantes, se debe de modo especial a la
carencia de habilidades y procesos de pensamiento.
Al desarrollar esos procesos, se propicia un aprendizaje más perdurable, significativo y de mayor aplicabilidad en la toma de decisiones y en la solución de problemas relacionados con la cotidianidad.
JOSE A. PARRA CENSP
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
José Antonio, gracias por tu comentario.
Angela Patricia Cubillos Hernández dijo:
El proceso de lectura crítica no es la mera acción de leer, decodificar un texto, requiere de base el desarrollo de varias habilidades, destrezas y competencias que le den objetividad y calidad a la misma. Es una tarea del maestro desde su rol iniciar y fortalecer el desarrollo de las diferentes habilidades de pensamiento requisito para el alcance del objetivo en la lectura crítica. De igual manera, la lectura crítica se constituye en una puerta al crecimiento personal, cognitivo y colectivo.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Angela Patricia, gracias por tu comentario.
JAIRO RAFAEL GALINDO SINISTERRA dijo:
para alcanzar una lectura crítica es necesario que los estudiantes logren desarrollar procesos de pensamiento que se debe fortalecer en los primeros años de escolaridad para así lograr que capten los conceptos, los apropien y los pongan en práctica desde su cotidianidad para aprender a resolver problemas que les plantea el mundo global
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Jairo Rafael, gracias por tu comentario.
LUZ HELENA AMAYA dijo:
En concordancia con el texto es claro que partiendo de una buena disposición de parte del lector, se consigue en gran medida la concientización y inferencia de la intencionalidad de quien escribe, fomentando el hábito lector, estimulando a estudiantes para que sea por medio de la lectura que se adquiera un aprendizaje significativo aplicable a diversos ámbitos de su vida
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Luz Helena, gracias por tu comentario.
YAIMARY CLAVIJO dijo:
En este proceso de lectura crítica visto en nuestro papel como docentes, donde posterior al análisis realizado por nosotros y la interiorización del texto, es necesario hacer una transmisión de ese saber, del conocimiento y de la apertura que tengamos para permear en nuestros estudiantes, sin limitar su capacidad para reflexionar, analizar, deducir, comparar y proponer de manera regulada acorde a sus propios pensamientos.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Yaimary, gracias por tu comentario,
AZUCENA PEREZ dijo:
Los procesos del texto son muy concretos y permiten que los estudiantes concreten sus aprendizajes , pero es muy difícil romper esa pereza mental que no les permite hacer esa autorregulación, como hacer que se motiven? como retomar esos hábitos?
muchas gracias son muy interesantes los textos
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Azucena, gracias por tu comentario.
Milena Roa Rodriguez dijo:
Estimado maestro:
De nuevo gracias por sus aportes y conocimientos brindados;La educación es la puerta de interración entre el hombre y la vida,educar para vivir un rol que nosotros como maestros influimos en el desempeño de nuestros estudiantes en el contexto real y en su futuro.
Por esta razón los procesos de pensamiento y lectura crítica anteriormente mencionados deben estar presentes en el contexto educativo y en las diferentes asignaturas del saber ,asi mismo desde los primeros años de ingreso a la educación formal.
Aprender a relacionar, aprender a inferir y aprender a autorregularse son elementos que enriquecen el proceso de enseñanza-aprendizaje y que aportan en gran medida en la formación integral y de calidad al proyecto de vida de nuestros estudiantes.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Milena, gracias por tu comentario.
Gonzalo Jiménez Yara dijo:
Saludo cordial, maestro Fernando. Para lograr la verdadera calidad de la lecturabilidad en los aprendices y su realidad inmediata; es de vital importancia potenciar sus operaciones mentales, la decodificación textual y los respectivos códigos y reaprehender de la vasta riqueza que ofrece la simbología y los múltiples significados del discurso y del hecho cotidiano. Es por ello, que nosotros los gestores del proceso enseñanza – aprendizaje, nos hacemos corresponsables de generar neo estrategias, neo didácticas y neo metodologías en procura de cualificar los universos textuales hacia la metacognición autorregulada del estudiante.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Gonzalo, gracias por tu comentario.
María del mar dijo:
Profe cual es la fecha exacta de este documento?
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
María del mar, gracias por tu comentario. Puedes usar la fecha en que aparece en este blog: 7 de octubre de 2016.
Victoria Urdaneta dijo:
Admirado profesor Vásquez: Quisiera saber qué tipo de instrumentos recomienda para medir el nivel de lectura crítica en alumnos de los primeros grados de primaria. Muchas gracias por compartir sus conocimientos y experiencias.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Victoria, gracias por tu comentario. Cuéntame un poco más de quiénes son esos estudiantes. ¿Qué materiales estás empleando?, ¿qué tienes en mente?
profejesusolivo dijo:
Un caluroso saludo, maestro.
De paso felicitarlo por sus logros académicos, que dicen mucho sobre la calidad de ser humano, además de intelectual, que está aportando para el crecimiento de quienes seguimos; las recomendaciones, los consejos, la lectura de su producción intelectual –sus libros-, y estamos ahí a la espera de qué podemos imitar, adaptar, en fin; de todo aquello que nos catapulte hacia el crecimiento como profesionales y, porque no decir, como sujetos sociales.
Es de suma importancia rodearse, de maestros como usted, que contribuyen y despliegan múltiples posibilidades de aprendizaje para acrecentar cada día más las estrategias y maneras de ser en el mundo educativo.
Por otro lado, haciendo un poco de reflexión sobre el concepto “pensamiento”, esa palabra tan del común, pero poco reflexionada por nosotros los que estamos en procesos de formación. Vale la pena adentrarnos un poco en las profundidades del término y explorar sobre qué es pensar, cómo podemos aprender a pensar, qué se necesita para aprender a pensar, ¿es posible enseñar a pensar? O por el contrario, como afirma el mismo Dewey, (2010) “…aun cuando no podemos aprender ni enseñar a pensar, podemos aprender cómo pensar bien,…” (p.51) Yo me atrevería a decir que uno como docente sí puede enseñar a pensar a sus estudiantes, puede que sea un poco atrevido, pero cuando uno en el aula de clase piensa en voz alta, está de cierta manera mostrando un camino del cómo pensar a sus estudiantes. Esta postura es asumible en el sentido que el mismo autor postula que “pensar es inquirir, investigar, inspeccionar, ensayar algo o sumergirse en ello con el fin de encontrar algo nuevo o ver lo ya conocido bajo una luz diferente” (p. 264). Si se toma el concepto, por ejemplo “inquirir” nos lleva a pensar que sí es posible mostrar al otro caminos para que muy cuidadosamente llegue a encontrar resultados de algo.
Bueno, por hoy me despido, maestro, y como siempre solicitando algo de bibliografía sobre pensamiento, pensamiento matemático, que es algo que me interesa en el momento y me sirve para el trabajo que estoy adelantando en investigación.
Agradezco su atención y, nos veremos en el I foro regional, es un orgullo para mí escucharlo como ponente en ese foro. Un abrazo fraterno.
Fernando Vásquez Rodríguez dijo:
Profejesusolivo, gracias por tu comentario. Ya te haré llegar alguna bibliografía al respecto.